F. Mollá.- Apenas un día después de que el diario El País publicara que el nuevo consejero de Sanidad, Javier Rodríguez, había ofrecido ser asesor de la consejería al ideólogo del ‘modelo Alzira’ de privatización hospitalaria, Antonio Burgueño, éste ha presentado su renuncia al cargo este miércoles 5 de marzo de 2014.
Burgueño trabajó en Sanidad hasta que la Comunidad de Madrid decidió renunciar al proceso de privatización de seis hospitales públicos de la región, tras la última sentencia del TSJM, que le costó el puesto al anterior consejero Lasquetty. Y ahora, el nuevo consejero le había ofrecido dicho puesto, por el que se iba a embolsar 3.000 euros mensuales. Pero, tras conocerse la noticia, el propio Burgueño ha presentado su renuncia “por motivos personales”.
El consejero de Sanidad, Javier Rodríguez, lo ha “lamentado mucho”, argumentando que la Sanidad madrileña “pierde a un buen asesor”.
“Le oferté si quería quedarse de asesor mío, me dijo que sí y después me ha mandado una carta diciendo que no lo quiere ser, yo lo lamento mucho, y si es por la presión pues apúntense un cero (a los periodistas), porque hemos perdido un buen asesor”, ha dicho, tras reconocer que desconoce si “le ha podido la presión”.
“Tienen que entender que una persona que se ocupa de la Sanidad tiene que comer de la Sanidad. Yo (por el consejero) tenía dos opciones: o le pongo de gerente de un hospital, o lo mando a una consulta o le tengo que poner de asesor, porque no podemos condenarle por haber sido asesor a no tener derecho a comer”, ha sentenciado.