P. Rodríguez.- La Federación Regional de Asociaciones de Vecinos de Madrid (FRAVM) ha denunciado que, pese a que debería estar abierto desde 2009, el nuevo Teatro Daoiz y Velarde haya abierto este lunes 23 de febrero únicamente para acoger una exposición del artista Óscar Murillo en el marco de la celebración de ARCO, con motivo de la cercanía de las elecciones, mientras sigue cerrado para los vecinos y con goteras, pese a haber costado más de 13 millones de euros públicos.
La ‘Plataforma Ciudadana Los Cuarteles para el Barrio’ creada a tal efecto denuncia que “el Ayuntamiento sólo abra un equipamiento público financiado con el dinero de todos a quien pueda pagarlo, en este caso, a la Embajada de Colombia, que financia los gastos generados por el evento”.
Los vecinos, ataviados con máscaras de la todavía alcaldesa, se manifestaron al grito de “Botella, lo tuyo es puro teatro”, pese a que la regidora no asistió al evento, evitando los abucheos que sufrió hace dos años por los vecinos de Retiro, cuando acudió a visitar el Centro Cultural de Ibiza.
El embajador de Colombia, presente en el acto, se hizo eco de la inauguración en su cuenta de Twitter, publicando una fotografía en la que se ve una de las pancartas instaladas por los madrileños que quieren que el teatro abra cuanto antes.
Oscar Murillo en la inauguración de su exposición en Daoiz y Velarde @Arco_Colombia pic.twitter.com/itNuXwneIK
— Fernando Carrillo F (@fcarrilloflorez) febrero 24, 2015
“La mascarada –añaden–tendrá como objetivo vender la imagen de que`han hecho algo’, además de emplear 12 millones de euros en un equipamiento que a los vecinos nos ha costado años de lucha y nuestros impuestos, para que ahora se llene de polvo a la espera de que alguien pueda pagar por su uso”.
Asociaciones vecinales y colectivos del distrito de Retiro constituyeron la Plataforma Ciudadana Los Cuarteles para el Barrio recuperando el lema de la campaña ciudadana que los vecinos llevaron a cabo hace más de 20 años para reivindicar el uso cultural y deportivo de los cuarteles y que, tras numerosas manifestaciones y movilizaciones, logró en gran medida sus objetivos. Veinticinco años después, el teatro infantil y el centro cultural es el último fleco pendiente de esta histórica reivindicación vecinal. La Plataforma reclama la inmediata apertura del centro con gestión pública y municipal y la habilitación de canales de la participación ciudadana para participar la definición de su programación, reivindicaciones que figuran en una recogida de firmas online.
El teatro, que ha abierto sólo para acoger esta exposición, cerrará el mes que viene.