C. Muñoz*.- Este martes por la noche, un grupo de unas 20 personas decidimos permanecer dentro de la biblioteca pública del distrito de Retiro. Nuestra intención era doble: por un lado exigir que se vuelva a los antiguos horarios de apertura en las bibliotecas públicas, que en épocas de exámenes era de 24 horas, y por otro lado tratar de mantener abierta, al menos durante una noche, la biblioteca del distrito, para que pudieran hacer uso de ella los estudiantes.
Era una acción coordinada y organizada por Juventud Sin Futuro en bibliotecas de la Comunidad de Madrid. Varios grupos nos dirigimos a las bibliotecas públicas de Pozuelo, Iglesia, Retiro y Puerta de Toledo. En nuestro distrito, lo apoyamos la Plataforma Retiro Por lo Público (AV Los Pinos, CS Seco, Asamblea Popular 15M, Izquierda Unida…).
La Policía desalojó las bibliotecas de Pozuelo y de Puerta de Toledo con amenazas de detenciones, para que los jóvenes no pudieran llevar a cabo las acciones reivindicacitivas. En las bibliotecas de Iglesia y Retiro resistimos encerrados. El grupo de activistas y estudiantes de Retiro estuvimos desde las 23.00 hasta las 7.00 horas, en que decidimos levantar el encierro.
Pocos minutos antes del cierre de la biblioteca, colgamos una pancarta y repartimos información entre los estudiantes, para animar a quienes quisieran apoyar las reivindicaciones. Aunque inicialmente parecía que nos dejarían permanecer estudiando, tras conversar con los encargados de seguridad y la policía que estaba presente, terminaron apagándonos las luces, impidiendo uno de nuestros objetivos: permitir a los estudiantes hacer uso de las instalaciones públicas durante la noche.
Tras la llegada de efectivos policiales y las órdenes de la empresa de seguridad, nos trataron de impedir utilizar los servicios, como medida de presión para abandonar nuestro encierro pacífico. Finalmente, tras la presión ejercida a través de las redes, accedieron a dejarnos hacer uso de los servicios. Fue una noche en la que compartimos ideas, ilusiones de cambios, críticas a la actual situación, y nunca nos faltó el buen humor, pues a pesar de la situación en la que nos quieren meter, sabemos que nuestra lucha es justa.
Los estudiantes quieren estudiar y no les dejan: muchos necesitan estudiar por la noche, y como siempre, es el sector con mayores necesidades de apoyo a quien se le niega. Hasta hace dos años, las bibliotecas abrían las 24 horas en los tres períodos del año que coinciden con las épocas de exámenes: febrero, mayo y septiembre. El gasto que supone es irrisorio: mantener el sueldo de un miembro de seguridad en las instalaciones, y los gastos de luz ocasionados: desde luego, una minucia en los presupuestos de la Comunidad de Madrid. Si no mantienen el servicio, es una vez más con intereses claros de degradar los servicios públicos para posteriormente vendérselos al mejor postor.
Este nuevo recorte en los servicios públicos se debe analizar junto a la desorbitada subida de las tasas universitarias y a la gravísima situación de desempleo que alcanza a más de la mitad de los jóvenes de nuestra comunidad, así como a la situación de empleo temporal y precario. No sólo se niega el trabajo digno, sino que ni siquiera se está facilitando la formación de nuestros jóvenes.
Desde Izquierda Unida, y estoy convencido de que igualmente desde la Plataforma Retiro por lo Público y todo el activismo que en los últimos años está dando la batalla al actual sistema, vamos a seguir exigiendo nuestros derechos como ciudadanos. Si no nos facilitan el acceso a ciertos servicios que por derecho son nuestros, seguiremos desobedeciendo a unos gobernantes que vuelven la espalda a los intereses de la mayoría. Seguiremos luchando en las instituciones y en las calles.
* César Muñoz es Coordinador de IU Retiro y Miembro del Consejo Político Regional de Izquierda Unida de la Comunidad de Madrid.
sorayuca says:
Biennnnnnnnnnnnnnnn!!!!!