P. Rodríguez.- Siete días después de que Zonaretiro informara de que hay varios indigentes viviendo en la entrada de los antiguos cines Abac Benllure, varios operarios han comenzado a tapiar este acceso en el que pernoctaban varios sin techo entre decenas de cajas de cartón. Este espacio está abandonado desde febrero, cuando el Grupo Eroski cerró la librería Abac.
Eroski, el grupo propietario de esta cadena de librerías, decidió cerrar la librería Abac del número 106 de la calle de Alcalá tras un intento fallido de negociación con el propietario del local para rebajar la renta.
Como informamos en Zonaretiro el pasado 22 de noviembre, el edificio acogía en su entrada decenas de cajas de cartón que hacen las veces de habitación para varios vagabundos que allí se resguardaban de noche y lo utilizaban como almacén de día. Este lunes noche ya no pudieron dormir allí. A la espera de conocer el futuro de este local, los dueños han preferido tapiar su entrada, dejando al descubierto las escaleras pero impidiendo el paso a los sintecho que utilizaban este entrante para resguardarse del frío.
De unos cines a una librería y al olvido
Abac Benlliure abrió sus puertas en noviembre de 2007, unos meses más tarde de que cerrara el mítico cine que le daba nombre al local, y del que aún se conserva la fachada y el luminoso de neón. Éste era el segundo establecimiento en Madrid de la cadena de Eroski y el tercero de la red al sumar el de Vitoria.
El local contaba con espacios lúdicos para el desempeño de actividades e iniciativas de interés para los consumidores, a saber: un chill-out infantil, pantalla de proyección (a partir de la antigua pantalla del cine de aproximadamente 6m x 7m en su ubicación original) y un rincón de presentaciones de libros y autores. Además, tenía un aula de pruebas y taller en el que se ofertaban distintas actividades.
Con todo, la crisis acabó con esta arriesgada apuesta dejando libre uno de los enclaves comerciales más relevantes de la zona. Quizá la sombra de El Corte Inglés de Goya, situado a escasos metros, fuera y siga siendo demasiado alargada.
Fotos: A. Tezanos
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juan Carlos says:
Estamos en la zona elegante de Madrid. La zona de los “aristos”
Aquí los bancos se mutilan, para que no puedan dormir los indigentes. Estos afean el barrio y conviene echarlos.
A cada zona, lo suyo. las bolsas de pobreza, que no se vean entre la gente bien.