L. Torres.- Los distritos de Retiro y Salamanca cuentan en sus calles con algunos de los radares que más multan por excesos de velocidad en Madrid y con algunos de los semáforos que más fotografían a los madrileños que no respetan el color rojo de estas señalizaciones de tráfico.
En O’Donnell 65 se encuentra el semáforo más conflictivo de toda la capital: el que marca la parada a los conductores que vienen desde el Pirulí (M-23 prolongación de O’Donell o incorporación de la M30 a O’Donnell) para que circulen los conductores que pasan la calle Doctor Esquerdo y que precede a un cruce, con raqueta y que se encuentra sobre un túnel soterrado. Es el que más madrileños se saltan en rojo, siendo capturados por la cámara fotográfica que se encuentra en altura unos cien metros por detrás.
El segundo de la zona que más dinero ayuda a recaudar al consistorio madrileño (puesto 19º del conjunto de los semáforos de Madrid) está ubicado en la Avenida de Menéndez Pelayo, frente al hospital Niño Jesús. Este semáforo multa a aquellos que, circulando junto al extremo este del Parque del Retiro, en dirección a la Avenida del Mediterráneo, sobrepasan el semáforo cuando deja de estar en ámbar.
El siguiente está muy cerca de este último: en la Avenida del Mediterráneo 32. Es el tercero que más multa en el distrito y el 20º de todo Madrid y, al igual que el de O’Donnell y el de Menéndez Pelayo, también cuenta con una cámara que capta desde lo alto el número de matrícula de los infractores. Multa a aquellos que no respetan el semáforo que precede al cruce con la calle Wallia y que dirige a los conductores a la M-30 y a la bifurcación que va a la A-3, carretera de Valencia.
Y de vuelta al distrito de Salamanca, el cuarto semáforo más conflictivo de esta área (el 21º que más multa en la capital) se halla a la altura del número 62 de la calle Francisco Silvela, en dirección a la Avenida de América. Está pasado el cruce con la calle de Béjar y justo antes de llegar al cruce con la calle de Méjico.
Radar de velocidad
El resto de semáforos de Retiro y Salamanca no son escenario de irregularidades destacables, pero sí hay un radar que acumula gran parte de las multas que pone el Ayuntamiento de Madrid por exceso de velocidad: concretamente, el tercero que más sanciona en toda la ciudad. Es el radar instalado apenas hace un año (el pasado 12 de agosto de 2011) en la M-30, a la altura de Fuente del Berro. Se encuentra exactamente en el kilómetro 6,7 de esta vía y fotografía a los vehículos que circulan en sentido sur, antes de llegar a la altura de O’Donnell.