S. R.- Casi un año después del cierre de la tienda de Tommy Hilfiger en el número 6 de la calle Serrano, el local ha cambiado el tradicional azul marino de la firma de moda estadounidense por el ‘rojo Ferrari’. El pasado sábado 10 de marzo abría allí sus puertas la primera tienda de moda y complementos de la famosa escudería italiana en Madrid.
El Ferrari Store de la ‘Milla de oro’ es la primera tienda de la marca en la capital y la tercera de toda España, tras la del aeropuerto de Málaga y la del Paseo de Gracia de Barcelona. De ahí que desde su apertura se haya convertido en objeto de curiosidad de vecinos y turistas, que se paran frente al escaparate para fotografiar la réplica del F50 que Fernando Alonso condujo el año pasado y entran como si lo estuvieran haciendo a un museo.
“Desde el lunes 12 hasta el miércoles entraron sobre todo clientes de la zona, con alto poder adquisitivo, a hacer sus compras, pero el jueves 15, con motivo del partido y el día de la apertura, entraron muchos turistas”, comenta a Zonaretiro el store manager de la tienda, el hispano-argentino Pablo López Marelli.
Sorprende al entrar la multiculturalidad de sus empleados, de diferentes nacionalidades y atendiendo a los compradores en diversos idiomas. “Igual que en la escudería se trabaja en equipo con compañeros de diversas partes del mundo, los dependientes también somos de diferentes países”, añade.
Son ocho hombres y mujeres, vestidos de rojo de arriba abajo, al igual que la tienda, que emula a los vehículos de competición de la marca con paredes forradas con chapa roja metalizada y baldas tapizadas en cuero beige, como los coches GT de la firma.
La tienda, de 500 metros cuadrados y rodeada de pantallas de plasma al más puro estilo boxes, consta de dos pisos: el que queda a pie de calle, donde se vende moda, calzado, marroquinería y complementos, tanto para hombre como para mujer, y el inferior, en el que se encuentran la moda infantil, los juguetes y las maquetas. Y los precios van desde los 15 euros que cuestan algunos souvenirs como cuadernos, llaveros o tazas, hasta los 40 de las camisetas, los 440 de los relojes, los 1.500 de un ajedrez, los 1.650 de las maleta de viaje de piel o los 5.700 de uno de los cascos que utilizó el piloto español.
El Ferrari Store es un sueño para los coleccionistas, que se pueden hacer con una de las 250 réplicas del volante de su último modelo de carreras con certificado de autenticidad, por 2.900 euros, o con la de un coche de la colección 6.000 a escala de la firma Malgam, por 6.400. Y un espacio mágico para los amantes de la Fórmula 1.
Objetos de lujo ‘made in Italy’ en los que, según López Marelli, “no sólo importa lo auténtico y bello, sino su funcionalidad”.
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Foto: Zonaretiro.com