La nueva era Botella

Madrid,

A. Pérez*.- Ríos de tinta y más caudalosos que el Manzanares han corrido durante años para contar las rencillas políticas entre D. Alberto y Dª Esperanza. Más allá del cotilleo, lo fundamental era cómo podía afectar aquélla trifulca a la gestión de los intereses ciudadanos.

Cabe ahora preguntarse, tras el ascenso al Olimpo gubernamental del Sr. Gallardón, si nos va a afectar en algo la mejor, de momento, sintonía entre Dª Ana y Dª Esperanza. Lo normal sería que sí, aunque no sabemos si a mejor o a peor.

Si nos taladran el Paseo del Prado, creo que nos romperán un trozo de historia y perderíamos la posibilidad de ganar mayor calidad, para un espacio urbano de encuentro y relación ciudadana, sin olvidar que los museos, hoteles, parques y jardines de la zona convivirían mejor con los pies que con las ruedas.

Si entendieran ambas y sus gobiernos que Madrid necesita una Ley de Capitalidad financiada para hacer frente a sus necesidades como capital del Estado y de la Comunidad, encontrarían un consenso ciudadano importante además de unos dinerillos necesarios.

Si acordaran ponerse, al fin, de acuerdo en las Áreas de Rehabilitación, sería una grandísima noticia, para cientos de familias afectadas y necesitadas de solución a sus viviendas.

Si colaboraran para clarificar quien hace cada cosa y con qué recursos, seguramente tendríamos mejor atención a los mayores, a los niños y también a quien quiere alquilar una vivienda con garantías, por ejemplo.

¿Lo harán? De momento, en mi opinión aparecen más  preocupadas por la austeridad. Si por lo menos compartieran que la austeridad no es recortar, sino gastar mejor, estaríamos aún dentro de las buenas noticias. Todavía hay tiempo, aunque no mucho.

*Ángel Pérez es portavoz de Izquierda Unida en el Ayuntamiento de Madrid

Ilustración: Patri Tezanos

Comentarios

  • Juanma GG says:

    Se agradece encontrar un artículo que, desde una posición ideológica absolutamente distante a la de las dos damas a las que nombra, resulta totalmente respetuoso e incluso otorga el beneficio de la duda ante la actuación de ambas sin partir de posiciones previas rígidas o dogmáticas.

    Enhorabuena, Sr. Pérez.

    Un abrazo.

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