L. Torres.- La nueva sede de Medialab-Prado, situada en el edificio rehabilitado de la Serrería Belga, ha recibido un galardón por la adaptación que el estudio de arquitectos Langarita Navarro ha llevado a cabo en esta construcción industrial de principios del siglo XX y ubicada en la calle Alameda 15, frente al Real Jardín Botánico de Retiro.
El premio de la XII Bienal Española de Arquitectura y Urbanismo reconoce el trabajo arquitectónico “de obras de alta calidad que puedan representar el mejor y diverso panorama de la arquitectura y el urbanismo en España” entre los años 2011 y 2012, en las que se valoran criterios como el compromiso de sostenibilidad medioambiental y económica, la reutilización de edificación y recursos existentes, las trasformaciones positivas del espacio y el paisaje urbano, las propuestas innovadoras, o las actuaciones de jóvenes arquitectos.
El edificio cuenta con espacios diáfanos y estructuras singulares, como ‘La Cosa’, una escalera central fluorescente y retroiluminada que comunica las dos naves, o la fachada digital, un dispositivo que cubre como un tapiz de luces la fachada norte y que se enciende para la proyección de piezas experimentales que juegan y se activan con el espacio el espacio exterior de la plaza de las Letras.
El uso original de este edificio de la antiguas Serrerías Belgas se contextualiza en el marco del pasado industrial y cultural de los viejos barrios de Madrid: desde La galería de máquinas del Palacio de El Buen Retiro a La Fábrica de Porcelana del Retiro (La China), la producción de papel en los Montes de El Paular en Rascafría para la Imprenta de Juan de la Cuesta donde se llevó a cabo la primera edición del Quijote, para terminar en las utopías industriales de finales del s.XIX que pretendía cambiar el país apostando por la emprendiduría y la innovación como la Fábrica de Mahou en la calle Amaniel a la producción de Cerveza Artesanal).
El edificio que hoy alberga Medialab-Prado uno de los pocos ejemplos de la arquitectura industrial que perviven en Madrid, rehabilitado por los arquitectos Langarita-Navarro, acoge desde ahora un laboratorio ciudadano de producción, investigación y difusión de la cultura digital.
El edificio tiene 4.000 metros cuadrados y dos elementos arquitectónicos singulares: ‘La Cosa’, un dispositivo interactivo y programable que comunica las dos naves, y la fachada digital, un tapiz de leds que cubre la cara norte y que ofrece una programación permanente de proyectos interactivos.
En la última década, Medialab-Prado ha generado una sólida comunidad local e internacional de usuarios e instituciones colaboradoras, y sus innovadoras metodologías de trabajo han sido replicadas en todo el mundo.
Sus talleres de producción, en los que los usuarios proponen proyectos y se ponen en contacto con colaboradores interesados, permiten el encuentro de personas con diversos perfiles -artístico, científico, técnico- y distintos niveles de especialización, desde expertos hasta principiantes y aficionados de todas las edades.
El programa que estrena Medialab en la Serrería Belga da continuidad a líneas de trabajo ya abiertas en su etapa anterior como la plataforma Inclusiva-net, dedicada a la cultura de redes (de febrero a junio, primer ciclo de conferencias y grupo de trabajo ‘Poéticas de la conectividad’); el Laboratorio del procomún, conformado por varios grupos de trabajo que abordan los bienes comunes desde ámbitos diversos; la plataforma Interactivos?, dedicada a explorar los usos creativos y educativos de la tecnología (del 15 al 27 de abril, taller ‘Herramientas para un mundo legible y editable’), o la plataforma Visualizar, dedicada a explorar la cultura de datos y la visualización de información (con un programa de actividades durante todo el año del grupo de trabajo sobre ‘Periodismo de datos’).
Estas actividades se ven reforzadas por una estructura del espacio conformada por estaciones de trabajo, una serie de laboratorios abiertos al público general en los que aprender y experimentar desde ámbitos como la participación en ciencia, el software y el hardware de código abierto, la economía sostenible, la visualización de datos, la diversidad funcional o la fabricación digital. Estas estaciones están atendidas por mediadores culturales especializados, y cada una tiene su propio programa de actividades.
* Horarios de apertura: Lunes a viernes de 16.00 a 21.00 horas. Sábados de 11.00 a 21.00 horas. Domingos cerrado.
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