L. Torres.- En la calle Juan Bravo se han contabilizado 283 árboles, de los cuales casi la mitad están envejecidos y un tercio están en situación de riesgo. El Ayuntamiento quiere lograr un bulevar con la totalidad del arbolado sano y sin peligro para los viandantes, por lo que procederá a talar y podar los árboles enfermos y plantar 60 árboles.
Los carteles colocados en la zona este lunes 18 de enero ya informan de la proximidad de los trabajos de reposición del arbolado del bulevar de Juan Bravo.
En los carteles están los datos sobre el estado real y el riesgo de los árboles del lugar, a tenor de un estudio exhaustivo que se realizó durante el pasado otoño y se informa de las actuaciones promovidas por el Ayuntamiento para solventar los problemas detectados y conseguir un bulevar con la totalidad de sus árboles sanos y sin ningún peligro para los viandantes.
En la calle de Juan Bravo se han contado 286 posiciones arboladas que corresponden a 283 árboles y tres marras y tocones. Hay siete especies diferentes; la mayoría son acacias del Japón (70%) y olmos siberianos (27%). Casi la mitad de los árboles son viejos y maduros, y un tercio del conjunto, 94 ejemplares, están en situación de riesgo; entre estos la mitad de los olmos.
Los problemas que se producen se deben a muchos factores: pudriciones, presencia de hongos (Inonotus hispidus) en tramos concretos del bulevar, baja vitalidad, falta de luz, contaminación, climatología, antiguas prácticas de poda, etcétera.
Ante esta situación el Área dirigida por Inés Sabanés propone la eliminación de arbolado sin futuro y desestructurado, la renovación del arbolado y las inspecciones periódicas de control.
Así pues, durante las próximas fechas se llevarán a cabo en Juan Bravo 56 talas, 33 acortamientos de ramas, un equilibrado de copa y cuatro podas de mantenimiento. A continuación, una vez finalizadas dichas labores, se iniciará el plan de sustitución, renovando el arbolado eliminado, incluso alguno más, pues se plantan 60 árboles. La sustitución de los árboles se hará procurando, entre otras medidas, aumentar el espacio entre los ejemplares para permitir la entrada de la luz.
Durante los últimos meses de han desarrollado también estudios en otros barrios. “Los resultados se irán presentando a las y los vecinos de cada uno de ellos, a las asociaciones y a las Juntas municipales de distrito de forma previa y dialogada, con el fin de confeccionar un Plan Estratégico del arbolado para toda la ciudad, que será diseñado conjuntamente con la ciudadanía”, ha señalado Sabanés, “es fundamental que las y los vecinos de Madrid puedan participar de forma activa en él”, concluye.