J. E. Villarino.- La presidenta Aguirre podría haberse ahorrado el fichaje del bancario Pablo Cavero como consejero de Transportes, porque para este viaje no hacían falta estas alforjas, que decían los maragatos. Para acabar subiendo el precio del transporte a los dos meses de tomar posesión, vale cualquiera.
Cualquier funcionario de tercera y santas pascuas. Como no hay dinero, venía para gestionar, pero sucumbió a lo fácil, es decir, a apretar la tuerca donde hay muchas tuercas para apretar, el billetico de cada viajero, que un poco (?) de muchos, hacen un mucho para las arcas públicas.
Me gustaría saber cómo calculan y comunican a los medios los políticos del Consorcio de Transportes la subida media, que ha cifrado en un 11%. Debe ser lo que se llama “media a pelo”: se suman las subidas de cada título y se dividen por el número de títulos. Sin coger el Excel, me temo que no han ponderado nada. La que vale es la media ponderada teniendo en cuenta el número de títulos que hay en cada categoría y si así fuese, el 11% se me hace corto. En esto estamos más de acuerdo con CC.OO., que estima la subida en el 25%. (Ver el detalle de la subida)
Con esto, teóricamente, la cobertura de los ingresos sobre los costes del transporte madrileño (excepto Cercanías) se espera que mejoren 10 puntos porcentuales pasando del actual 40-60% al 50-50%. Lo veremos, y veremos si se cumple y se ha tenido en cuenta la persistencia de la tendencia de la demanda y los ingresos a la baja, iniciada con la crisis económica.
Bien, pero ¿dónde está el origen, la causa última de que poco a poco los ingresos se hayan ido distanciando, a la baja, de los costes, deteriorándose las cuentas del transporte madrileño? Pues, además de la crisis y el desempleo, ni más ni menos, en lo de siempre, que no nos cansaremos de repetir: en el despilfarro, malversación, mala gestión y alegría con que se han manejado los recursos públicos de todos. Venga de ampliaciones de METRO fuera de la capital a ninguna parte (léase Arganda); el METROSUR, que da vueltas y vueltas sobre sí mismo, evitable con el cierre de la línea C-5 de Cercanías y pocos retoques más (para mayor gloria del edil Gallardón); los METROS LIGEROS a zonas residenciales de mayor renta per cápita de España y Europa, a las que el transporte colectivo, público o privado, les importa bien poco. Y así muchas actuaciones más. (De las faraonadas de FOMENTO ya hemos hablado, con sus tres túneles desde y a la misma parte).
Se ha tirado la red (costosísimas inversiones) en caladeros con pocos peces (viajeros), esquilmados, por si no había suficiente, con la crisis que nos azota. Pero, la flota hay que acabar de pagarla (amortizarla) y mantenerla en pie, a través de altísimos costes, que crecen y crecen, mientras los peces disminuyen y disminuyen en cuantía. Ésta es la verdadera razón de que nuevamente los políticos se acuerden de los ciudadanos cuando truena, como es ahora el caso, y vengan a rascarnos los bolsillos para tapar su infumable gestión, sus megalomanías, sus despilfarros y su desvergüenza.
Los gráficos adjuntos muestran, en una comparativa con otros 22 países, mayoritariamente europeos, que el precio del Abono de Transportes y del billete sencillo de 2 € de Madrid se sitúan en torno al valor de la media y el de 1 € entre los valores más bajos del ranking.
No olvides, estimado lector, que esta subida de precios ya la anunciamos en este Paseo de Coches allá por mediados de febrero, adelantándonos a todos los medios, autoridades y mortales. Porque como decía el otro, lo que no puede ser, no puede ser, y, además es imposible.