C. Linares.- Los turismos y furgonetas de gasolina anteriores al año 2000 y los diésel anteriores a 2006 (considerados coches sin etiqueta de la DGT) no podrán circular en los episodios de alta contaminación, en caso de aprobarse la revisión del actual protocolo contra la contaminación. En España hay 16.398.768 vehículos sin esta etiqueta medioambiental: 1.792.208 en la Comunidad de Madrid.
El área de Medio Ambiente y Movilidad del Ayuntamiento de Madrid está revisando el protocolo de medidas a adoptar ante episodios por alta contaminación de dióxido de nitrógeno (NO2) de modo que la circulación de vehículos sin distintivo ambiental de la DGT, los más contaminantes, se limite en los escenarios 2 y 3.
Las medidas establecidas en el escenario 2 del protocolo para episodios de alta contaminación son la reducción de la velocidad a 70 Km/h en la M30 y accesos desde la M40 y la prohibición de estacionamiento de vehículos en zona y horario SER a los no residentes.
El escenario 3 del protocolo de contaminación supone la prohibición de circular a partir de las 6:30 y hasta las 21 horas en el área interior de la M30 a todos los vehículos cuya matrícula acabe en número par en días impares y en número impar en días pares, (excepto transporte público, transporte escolar, vehículos comerciales…).
Cuatro etiquetas
En la actualidad hay cuatro etiquetas o pegatinas: la 0 emisiones, de color azul, para los vehículos eléctricos; la ECO (azul y verde) para los vehículos híbridos o vehículos “ECO”; la C (verde) para los turismos y furgonetas de gasolina matriculadas a partir de 2006 y diésel a partir de 2014 y la B (amarilla) para los vehículos de gasolina matriculados a partir de 2000 y de diésel a partir de 2006.
La colocación del distintivo es voluntaria, sin perjuicio de que cada administración con competencias en Tráfico, como son los ayuntamientos, pueda establecer su obligatoriedad en casos concretos, tal y como señaló en su día la DGT.
En cualquier caso, llevar la etiqueta solo facilita la rápida identificación visual de los vehículos y, por ello, la DGT recomienda que se coloque en el ángulo inferior derecho del parabrisas delantero u otro sitio visible del vehículo.
Porque lo que realmente identifica el potencial contaminante del coche es la matrícula y los ayuntamientos pueden acceder al registro de vehículos de Tráfico para comprobarlo.