Las personas que llevan bebés en los brazos, las mujeres embarazadas, los ancianos y las personas que necesitan muletas tienen preferencia de asiento sobre el resto. Para ellos, Metro de Madrid disponía de asientos señalizados. Pero como, al parecer, muchos viajeros hacen caso omiso de los letreros, Metro ha decidido pintar dichos asientos reservados y así sacar los colores a quienes, no portando bebés, ni estando en estado, ni teniendo edad avanzada ni padeciendo problemas de movilidad deciden sentarse en ellos.