Un año después del asesinato de la madrileña Diana Quer (ocurrió en la madrugada del 21 al 22 de agosto de 2016 en la localidad coruñesa de Puebla del Caramiñal) y tres meses antes de que apareciera el cadáver (fue hallado la madrugada del 31 de diciembre del 2017 en un pozo de una antigua fábrica abandonada situada en la parroquia de Asados, sumergido a más de ocho metros de profundidad), su hermana Valeria Quer denunció una violación ocurrida el 17 de septiembre de 2017 en las fiestas de Majadahonda. ACTUALIZACIÓN: El agresor ha sido condenado a dos años por abuso sexual
Según el escrito de acusación del fiscal, los hechos se remontan al día 17 de septiembre de 2017, cuando acusado y víctima coincidieron por la noche en las fiestas de Majadahonda.
Ya por la mañana, él llevó a la víctima a una casa propiedad de su familia en la localidad segoviana de Carabias y allí se produjo el supuesto abuso sexual, aprovechando el agresor el estado de embriaguez de la víctima.
El juicio ha tenido lugar en Segovia porque los hechos y la investigación tuvo lugar allí
El juicio por dicha violación ha comenzado este martes 23 de marzo de 2021 a las 09.30 horas a puerta cerrada en la Audiencia Provincial de Segovia, provincia a la que pertenece el pueblo en el que se habría cometido la agresión sexual y en la que comenzaron las investigaciones (el proceso parte de unas diligencias previas que abrió en 2018 el Juzgado de Primera Instancia e Instrucción de Sepúlveda -Segovia- porque los hechos se produjeron presuntamente dentro de este partido judicial), aunque la denuncia se interpuso en Pozuelo de Alarcón (Madrid).
En la sesión del martes 23 de marzo de 2021 declararon el acusado, la víctima y otros testigos y se practicaron también parte de las pruebas periciales.
El miércoles 24 de marzo de 2021 continuaron las periciales, las pruebas documentales y los informes de las partes, y el juicio quedó visto para sentencia.
La Fiscalía pide 6 años de prisión para el procesado y la acusación particular, en representación de la víctima, pide 10, en ambos casos por un delito de abuso sexual con penetración, y no de agresión sexual como en un primer momento informó la Sala.
Por su parte, la defensa del acusado sostiene que no se produjo ningún tipo de acto sexual, por lo que pide la libre absolución del procesado.