El domingo 29 de agosto de 2021 a las 11.00 horas los bomberos acudieron a sofocar un incendio al Cerro del Murmullo de Vallecas y hallaron un cadáver envuelto en una tela. Estaba desnudo de cintura para arriba y tenía los dedos cortados y le habían arrancad los dientes. Dos años después, este jueves 20 de julio de 2023, la Policía Nacional informa de la detención de una mujer como presunta autora de este homicidio.
Los bomberos encuentran un cadáver con los dedos cortados y envuelto en una manta al ir a apagar un incendio
El cadáver se trasladó al Instituto de Medicina Legal de Valdebebas y los agentes de Policía Científica y de Homicidios lograron averiguar la identidad del cuerpo. La víctima era un marino mercante de profesión, que solía permanecer varios meses fuera del territorio español y recurría a personas de su entorno como destinatarias del ingreso de sus nóminas mensuales. Cuando regresaba a España, estas personas le hacían entrega del dinero generado con su trabajo, hecho que en ocasiones no ocurría, convirtiéndose en víctima de continuos engaños.
En agosto del año 2021, la víctima llegó al aeropuerto de Madrid donde le esperaba una amiga, la cual se había convertido en los últimos años en la persona de confianza que recibía el ingreso de sus nóminas y se apropiaba constantemente de manera indebida de ese dinero.
Tras encontrarse, ambos se desplazaron a la localidad de Torrejón de Ardoz donde la presunta autora de los hechos tenía un local alquilado y es en ese momento cuando se perdió la pista de la víctima. Los agentes de homicidios pudieron corroborar que fue en ese local donde se consumó el homicidio y que posteriormente la presunta autora solicitó a un conocido, mediante engaño, la utilización de su vehículo particular para, con el pretexto de realizar una mudanza, trasladar el cuerpo sin vida días después. Hizo creer a su entorno que continuaba con vida
En días posteriores, la autora cubrió el cadáver y lo trasladó en el vehículo hasta el pinar ubicado en la calle Cerro del Murmullo donde lo quemó. Además, la responsable hizo creer a los allegados del fallecido que su desaparición había sido voluntaria y que seguía con vida.
Tras numerosas gestiones, los agentes detuvieron a esta mujer la cual fue puesta a disposición de la autoridad judicial quien decretó su ingreso en prisión. Además se practicaron entradas y registros tanto en el domicilio de la autora como en el local donde se produjo el homicidio y en el vehículo utilizado para el transporte del cadáver.