F. Molllá.- Agosto en España es sinónimo de vacaciones y de… robos en viviendas. El periodo estival implica desplazamientos, viajes, lugar de vacaciones y nuevos destinos para desconectar y disfrutar de un merecido descanso, sin embargo, estas prolongadas ausencias en casa son aprovechadas por ladrones y bandas organizadas para acceder a los hogares con mayor facilidad y llevarse todos los artículos de valor económico y sentimental.
Según datos del Ministerio del Interior, en 2016 se produjeron 112.925 robos con violencia en domicilios. Aunque las cifras han caído ligeramente (-2%) con respecto a los datos recogidos en 2015, lo cierto es que no invitan a la tranquilidad.
- Invertir en una puerta blindada de última generación: Es ampliamente conocido que una puerta sencilla puede abrirse con una simple radiografía. Por eso, es importante invertir en una puerta blindada de última generación que dificulte la entrada de los ladrones. Es verdad que muchos ya tenemos puertas brindadas en casa pero algunas son de la década de los 80 y 90, llevan tanto tiempo en el mercado que ya los profesionales de los robos saben cómo abrirlas sin mucho esfuerzo. Cuanto más trabajo le demos para abrir la puerta menos posibilidades tendremos de que entre, pues optarán primero por aquella viviendas que les son más fácil acceder.
- Instalar rejas en puertas y ventanas: Si la vivienda es unifamiliar, está en las plantas más bajas del edificio o tiene fácil acceso desde otras viviendas cercanas, es aconsejable invertir en rejas para puertas y ventas. “Rejas y cárcel se asocian en nuestra mente, sin embargo, hay muchos y actuales diseños que nos proporcionan la seguridad que necesitamos sin necesidad de dar un aspecto de prisión o andaluz a la vivienda. En el mercado podemos encontrar desde las clásicas ballestas de seguridad, fáciles de recoger cuando estamos en casa, hasta modelos más sofisticados y modernos como las ventanas mallorquinas”, asegura Almansa.
- Contar con ventanas, puertas y persianas fuertes: Sean correderas o abatibles, lo importante es que cada puerta y ventana proteja el interior de la vivienda. Contar con un cierre fuerte y un material de calidad, aumenta la fortaleza del producto y, por tanto, la seguridad del hogar. También hay que tener cuidado en la elección de los cristales ya que, además de aislarnos del frío o el calor y del ruido, serán un sistema de seguridad más con el que cuente la casa.
- Colocación de alarmas: Contar con un buen sistema de seguridad que ofrezca vigilancia durante las 24 horas del día es uno de los consejos más reiterados por los profesionales del sector. Así evitaremos que nuestra casa sea objeto de deseo para los cacos.
- Comprobar todos los accesos antes de irnos de vacaciones: Aunque debe ser una rutina cada vez que salimos de casa, al irnos de vacaciones debe ser una tarea hecha a conciencia. Debemos comprobar todas las puertas y ventas y verificar que está bien cerrado y justo como queremos dejarlo.
- Que parezca que hay alguien: Actualmente la domótica permite manejar muchas partes de la casa en la distancia, así que si tenemos esta opción es recomendable subir y bajar persianas varias veces al día, encender alguna luz por la noche e incluso la televisión o radio para que se escuche ruido. Si no disponemos de esta tecnología, otras opciones son no dejar todas las persianas bajadas, dejar siempre alguna luz encendida (en el enchufe de alguna lámpara se puede poner un temporizador que la encienda y la apague a ciertas horas), programar la televisión para que se encienda a ciertas horas del día o contar con la ayuda de algún vecino que no esté de vacaciones para que quite el correo del buzón o pase al menos cada 2 días a regar las plantas, bajar unas persianas y subir otras, y cambiar la luz que está encendida. La idea es que parezca que hay gente dentro.
- Llevarnos las cosas de más valor: Si vamos de vacaciones a nuestra segunda residencia, no será complicado llevarnos algunas cosas de valor como joyas o cara tecnología. Si vamos a viajar y esto es más complicado, una buena opción es dejárselo a algún familiar o amigo de confianza que nos lo pueda custodiar durante nuestra ausencia.
- Cuidado con lo que publicamos en redes sociales: Seguro que estas vacaciones te has hecho unas fotos preciosas y estás deseando compartirlas pero no lo hagas todavía. Haz creer y dudar a los ladrones, pon una foto de la playa pero luego otra de tu casa y de tu barrio así no estarán seguro de que te fuiste. El resto de tus fotos de verano las puedes publicar cuando estés de vuelta.
- Un seguro de hogar: No te evitará el susto, ni el mal trago, pero tener un seguro antirrobo para el hogar puede paliar los daños y hacer que disfrutes de tus vacaciones con más tranquilidad.
Si al regreso, la casa está abierta o te avisa algún vecino de que ha visto algo raro… lo mejor es no entrar y no tocar nada. Llamar a la policía para que ellos comprueben si la vivienda está vacía y si hay alguna prueba que les pueda ayudar a detener a los ladrones.
A pesar de que son muchos los propietarios de vivienda que no toman ni una sola medida para proteger su hogar, quienes sí lo hacen optan, en la mayoría de los casos –más del 60%–, por las puertas blindadas, seguida de las rejas en puertas y ventanas y la colocación de alarmas –más de un 20% en ambos casos–.
Persianasa says:
Existen pinzas y accesorios de seguridad para persianas que puede instalar uno mismo con el objetivo de mejorar la protección y dificultar al “posible ladrón” el acceso al hogar.