Ocurrió en Madrid durante el Puente de la Constitución, aunque no ha trascendido hasta ahora. Una joven estudiante extranjera de 27 años de edad que llevaba seis meses viviendo en Madrid tomó un autobús a las cuatro de la madrugada tras una noche de fiesta. Era el autobús equivocado. Así que, nada más darse cuenta, se bajó del mismo para tomar el correcto.
Tras ella, bajó un hombre, que le ofreció su ayuda para llegar a casa. Al momento, ella empezó a notar que podía estar en peligro e intentó separarse de él, pero él comenzó a golpearla. Ella buscó su teléfono móvil para pedir auxilio, pero el hombre se lo había quitado.
Le propinó una brutal paliza y la violó y sólo se fue cuando la creyó muerta.
Lo ha contado ella misma en su perfil de Facebook para alertar a otras chicas.
El violador ya ha sido detenido.