Un hombre de 42 años ha aparecido muerto en una habitación del Hotel Palace el 30 de octubre de 2021. El hombre no presentaba signos de violencia pero la habitación estaba revuelta y faltaban algunas de sus pertenencias. ‘El Mundo’ apunta que pudo haber ingerido algún tipo de droga mientras mantenía relaciones sexuales con invitados. Habría subido a su habitación con dos o tres personas, que además le habrían robado.
El huésped, de origen latinoamericano, llegó al hotel el jueves 28 de octubre.
El sábado día 30 por la mañana los trabajadores del hotel encontraron el cadáver, tras entrar en su habitación porque llevaba más de 24 horas sin realizar ningún movimiento de salida o entrada.
El cadáver del fallecido ha sido reclamado el lunes 2 de noviembre por su pareja desde Miami y será trasladado a Puerto Rico durante los próximos días.
Se trata de José Rosado, exconsejero delegado de Hijos de J. Barreras, el mayor astillero privado español.
ACTUALIZACIÓN 29 DICIEMBRE: La Policía ha detenido a dos personas como presuntos autores de su muerte.
Los detenidos son un hombre de nacionalidad marroquí de 29 años y otro de nacionalidad rumana de 39, que el fallecido conoció la noche en que fue asesinado en una discoteca del centro de Madrid. Los tres subieron a la habitación 541 del Hotel Palace en la que se alojaba la víctima para mantener relaciones sexuales.
Cuando fue al baño, los detenidos echaron en su copa tres veces más de éxtasis líquido de lo que una persona puede soportar. Al beberse la copa, se desmayó y los detenidos aprovecharon para robarle. De hecho usaron su tarjeta en dos establecimientos de Móstoles.
Pero la víctima no sólo se había desmayado. La mezcla de alcohol y éxtasis le provocó un edema pulmonar mortal.
Gracias a que los detenidos usaron su tarjeta, la Policía acotó la búsqueda y fueron localizados y detenidos. En su casa había 2.500 euros en efectivo, teléfonos móviles, tablets, joyas, documentación de otras personas y objetos de valor.
Están acusados de delitos de homicidio, robo con violencia y estafa.
El ciudadano rumano de 39 años ya había sido detenido en ocasiones por robos con violencia y delitos contra la salud pública y otros de receptación.
Y el ciudadano marroquí de 29 años tenía 17 antecedentes, la mayoría por robos con violencia, estafa, robo con fuerza, asociación ilícita y usurpación de funciones, entre ellos dos robos cometidos mediante un procedimiento similar: uno en julio y otro este mismo mes de diciembre. En ambos casos logró robar a sus víctimas drogándoles con éxtasis, aunque no fallecieron.
Tras ser puestos a disposición de la autoridad judicial, el juez decretó su ingreso en prisión.