Los seis policías que el 21 de marzo de 2022 a las 00.50 horas irrumpieron con un ariete en un piso de la calle Lagasca 18 para disolver una fiesta -cuando las fiestas en pisos estaban prohibidas por la pandemia-, accedieron a su interior y detuvieron a sus moradores, podrían enfrentarse a penas de hasta 4 años de cárcel por un delito de allanamiento de morada.
Según indica el código penal, cuando la entrada o mantenimiento en morada ajena se produzca con violencia o intimidación, la pena asciende a: Privación de libertad entre 1 y 4 años. Más multa de 6 a 12 meses.
Las intervenciones policiales a la fuerza fueron avaladas por el ministro del Interior, Fernando Grande-Marlaska, en el caso de que se tratará de pisos turísticos, un extremo descartado en este caso.
Los agentes que usaron un ariete para irrumpir en un piso podrían enfrentarse a penas de hasta 4 años de cárcel
Hace unas semanas, la Audiencia Provincial de Madrid ordenó juzgar a los seis policías, entre ellos al subinspector al mando del operativo, al estimar el recurso interpuesto por el morador de la vivienda contra el auto por el que el juez acordaba levantar a cinco de ellos la imputación a instancias del fiscal.