La Comunidad de Madrid ha recibido por parte del Ministerio de Sanidad 9.450 test de diagnóstico rápido que no funcionaban tanto en cribado de población como en muestras de laboratorio, donde se comprobó que sus resultados eran “sospechosos”.
El consejero de la Comunidad de Madrid, Enrique Ruiz Escudero, ha detallado que se decidió comprobar la fiabilidad de estos sistemas de detección en muestras de laboratorio que ya se sabían que eran casos positivos y ya ahí los resultados fueron un “poco sospechosos”, dado que el 30 por ciento de los análisis de muestra daban “falsos positivos”.