L. Torres.- El Hospital Gregorio Marañón ha habilitado una sala de descanso para familiares de niños con cardiopatías congénitas o ingresados varios días en las unidades de cuidados intensivos, que dispone de baño, cocina con frigorífico, estanterías, una mesa comedor, sofás y juguetes para los más pequeños.
El hospital infantil Gregorio Marañón registra cada año más de 7.000 ingresos, especialmente en Cardiología y Pediatría general, con una estancia media de cinco días, y realiza unas 3.500 cirugías y 93.000 consultas.
En la habilitación de esta nueva salas han colaborado la Fundación Menudos Corazones y la Fundación IKEA.
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