P. Rodríguez.- El Colectivo de Víctimas del Terrorismo (Covite) ha anunciado este lunes 2 de junio de 2014 que va a elaborar un ‘mapa del terror’ de la Comunidad de Madrid, en el que documentará las 360 víctimas que ha habido por asesinatos de distintos grupos terroristas.
Covite elaboró en una primera fase un ‘mapa del Terror’ limitado a Euskadi, en el que a través de esta herramienta multimedia localiza y detalla cómo ocurrieron más de 600 asesinatos terroristas desde 1960 hasta 2009, cuando ETA perpetró el último atentado en suelo vasco.
El mapa incorpora un motor de búsqueda que permite encontrar por ejemplo datos como cuántos policías han sido asesinados con bombas lapa, cuántos jóvenes de entre 18 y 20 años han muerto en atentados terroristas o el número de asesinatos perpetrados en un determinado periodo.
Tras Euskadi, Madrid
El objetivo de Covite es hacer lo mismo en toda España y la siguiente comunidad que documentará con esta herramienta es la de Madrid.
La presidenta de Covite, Consuelo Ordóñez, ha anunciado que antes del verano empezarán a trabajar en esta comunidad y ha indicado que aspiran a hacer lo mismo a nivel europeo porque han encontrado interés en esta herramienta por parte de asociaciones de Irlanda del Norte.
Durante la presentación de la iniciativa en el Parlamento Vasco de Vitoria-gasteiz, Ordóñez ha reprochado la falta de apoyo económico del Gobierno Vasco para elaborar este proyecto y ha asegurado que se sienten “solos” porque las instituciones no cuentan con ellos.
Covite solicitó el año pasado una subvención al Ejecutivo vasco de 19.500 euros para elaborar su mapa multimedia pero éste se la denegó por su “coincidencia” con el llamado ‘mapa del sufrimiento’ del Gobierno Vasco.
El del Gobierno Vasco cifró en más de mil personas las víctimas mortales por vulneraciones de derechos humanos entre 1960 y 2013, entre ellas 837 por ETA, 94 por las Fuerzas de Seguridad del Estado (FSE) y 73 por grupos parapoliciales y de extrema derecha.
Covite rechaza el trabajo del Gobierno Vasco porque opina que es un ‘totum revolutum’, por eso hizo el suyo y en lugar de hablar de cifras de víctimas, puso nombre y apellidos a cada una de ellas.