P. Horrillo.- El alcalde de Madrid, Alberto Ruiz-Gallardón, anunció este miércoles su intención de que el Impuesto sobre Bienes Inmuebles (IBI) desaparezca para las personas físicas y pase a integrarse en el IRPF. Con esta modificación, Gallardón considera que se introduciría “un criterio social en el IBI” ya que tendría en cuenta la capacidad económica del contribuyente. El alcalde de Madrid necesita que la Administración Central dé luz verde a esta propuesta que intenta recaudar mediante la retención mensual del IRPF. En otras ciudades, como Barcelona, el contribuyente puede realizar un pago fraccionado del IBI hasta en cuatro partes para evitar el descalabro de la cantidad completa en una sola vez.
Este anuncio se produce al día siguiente del pleno del Ayuntamiento en el que tanto el grupo socialista como los concejales de Unión, Progreso y Democracia (UPyD) propusieran sendas iniciativas para reducir la carga de impuestos sobre los ciudadanos. Noelia Martínez, del PSM, planteó la paralización del actual modelo de revisión catastral y pidió que se solicitara al Ministerio de Economía y Hacienda la suspensión de todas las actuaciones. Por su parte, David Ortega, portavoz de UPyD, pidió la congelación del IBI durante los próximos cuatro años reduciendo los tipos de interés de las viviendas a los aplicados en 2007, es decir, un 0,543%. Ortega advirtió que, con las actuales subidas anunciadas por el Consistorio, desde 2001 hasta 2015 los madrileños van a sufrir un incremento de la presión fiscal de un 500%.
Por su parte, Juan Bravo, el concejal popular de Hacienda, se defendió de estas propuestas aludiendo que “la inmensa mayoría de los ingresos viene por los impuestos y el IBI es el principal impuesto del Ayuntamiento”. La propuesta de UPyD también fue rechazada por Izquierda Unida al considerar que la congelación del IBI favorecería a las rentas altas y perjudicaría a las más bajas, y coincidió con el PP en que, además, el Ayuntamiento recibiría una menor recaudación.