F. Mollá.- La exministra Carme Chacón ha muerto este domingo 9 de abril de 2017 a los 46 años en su domicilio en Madrid situado en la calle Viriato 20 (Chamberí), según ha trascendido hoy pasadas las 20.00 horas.
A las 19.30 horas, Emergencias 112 ha recibido la llamada de una amiga de Chacón con la que había quedado a comer, ante su falta de respuesta. Chacón tampoco respondía a su familia, a la que a su vez avisó esta amiga.
La policía y los bomberos han abierto la vivienda y se han encontrado a Chacón sin vida. Llevaba siete horas muerta.
Sufría una cardiopatía congénita
“Tengo lo que se llama el corazón al revés”, consistente en una trasposición de grandes vasos, confesó hace unos años. Lo sabía desde que tenía 10 años pero gracias a los avances de la medicina, había llevado una vida totalmente normal. Incluso había jugado al baloncesto, su “gran pasión”, dijo el pasado mes de noviembre en el primer Congreso Nacional de la Asociación Española contra la Muerte Súbita (AEMS).
“Conozco mi anomalía cardiaca, sé que controles tengo que llevar, cuáles son mis limitaciones y agradezco a mis padres que siempre me han tratado como una niña sana”, señaló Chacón en una entrevista, donde puntualizó que padecía un bloqueo auriculoventricular completo y la transposición de grandes vasos.
“Siempre había vivido privadamente mi cardiopatía y hablando con mi doctor vi que podía aportar mi granito de arena. Es importante la detección, el conocimiento. Cualquier síntoma o antecedente familiar tiene que llevar a los niños a revisión”, aconsejó.
En la misma entrevista explicó que nació en 1971 y detectaron su enfermedad “a través de la trompetilla”. “Sólo diez años después llegaron a España las máquinas que permiten hacer ecocardiogramas y supimos que tenía lo que se conoce el corazón al revés, la transposición de grandes vasos”, explicó en su día Chacón, que recordó que cuando nació su hijo su primera pregunta fue relativa a su corazón. “Ya se veía que no tenía nada pero cuando desperté pregunté por su corazón. Ese temor lo tienes siempre porque vives con él”.
El hijo de Chacón, Miquel, de 8 años, del que estaba embarazada de ocho meses cuando juró ministra de Defensa, es fruto de su matrimonio con quien fuera asesor de Zapatero, director general de la Casa de América y secretario de Estado de Comunicación, Miguel Barroso con quien estuvo casada nueve años, hasta su divorcio en verano de 2016.
En aquella entrevista sobre su estado de salud, habló de la importancia de las revisiones periódicas y de hacer deporte: “Conociendo la enfermedad se vive con plenitud y hay que saber que el deporte puede ser un riesgo pero controladamente te ayuda a vivir mejor. Eso sí, nosotros no podíamos hacer deporte profesional pero yo hago el deporte que puedo por el tiempo del que dispongo”.
Diputada hasta 2016
Exministra socialista de Defensa y Vivienda, fue diputada en el Congreso desde el 2000 hasta el 2016.
Renunció a entrar en las listas electorales de los comicios del 26 de junio de 2016 y abandonó el acta de diputada para incorporarse a un bufete de abogados en Madrid.
En el 2007 fue nombrada titular de Vivienda y en 2008 se convirtió en la primera mujer española al frente del Ministerio de Defensa.
Tras la retirada de su principal valedor, Zapatero en 2011, se planteó aspirar a ser la candidata socialistas a la Moncloa, pero finalmente descartó disputarle el puesto al entonces vicepresidente Alfredo Pérez Rubalcaba.
El pulso lo terminaron librando, meses después, por la secretaría general del PSOE en el congreso federal de Sevilla.
Pese a contar con el apoyo de destacados barones socialistas y líderes emergentes como la andaluza Susana Díaz, Chacón acabó perdiendo por 22 votos.
Tras la dimisión de Rubalcaba en el 2014, sopesó volver a intentarlo pero acabó anunciando que no se presentaba en una carta: “No contribuiré a la ceremonia de la confusión”, sentenció.
Después de haber sido cabeza de lista del PSC por tercera vez en las elecciones generales del 20-D, renunció a volver a presentarse en las del 26-J.
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