El Área de Cultura, Turismo y Deporte se ha marcado como objetivo realizar los trabajos necesarios para que el refugio antiaéreo situado en el parque de El Retiro pueda ser visitado por el público. Al igual que otros espacios similares como el búnker del parque de El Capricho, el refugio se incorporará a las visitas guiadas de Pasea Madrid y Madrid Otra Mirada con el fin de que los ciudadanos conozcan su historia en grupos reducidos con las explicaciones de expertos y de manera completamente gratuita.
Refugio antiaéreo situado en el parque de El Retiro
Para ello, durante el presente mandato, el Ayuntamiento ha llevado a cabo una limpieza general, la adecuación de los espacios, una intervención para dotar el espacio de instalación eléctrica y la colocación de cerramientos seguros de las estructuras descubiertas.
Este refugio antiaéreo, que data de la época de la Guerra Civil, se empezó a construir en el año 1936 y existe un documento que certifica su finalización en diciembre de 1938. Después de la guerra, permaneció cerrado más de 30 años, siendo utilizado en la posguerra para el cultivo del champiñón por sus condiciones de poca luz y humedad.
Se deduce que era un refugio en forma de galería, respondiendo así al modelo típico de refugio de la Guerra Civil, ya que tenía profundidad variable, estaba oculto al exterior y disponía de tres entradas (dos en el parque y una en la calle Menéndez Pelayo) y que era un refugio de defensa pasivo, es decir, no tenía armamento para defenderse, estaba construido, por tanto, para la población civil, con un aforo aproximado de 275 personas, los pasillos eran de 1,10 a 1,15 metros de ancho y de 1,60 a 2,48 metros de alto, las galerías eran rectas y cada 25 metros se quebraban en un ángulo de 90º para evitar que las ondas expansivas llegasen a más gente.