L. Torres.- La zarzuela ‘La Corte de Faraón estrenada en el Teatro Eslava de Madrid la noche del 21 de enero de 1910, con libro de Perrín y Palacios y música de Vicente Lleó, y que hace dos veranos se representó en la terraza del Centro Cultural Casa de Vacas del Parque del Retiro vuelve a Madrid, esta vez a los Jardines de Sabatini, del 13 al 25 de agosto a las 22.00 horas.
Es quizá única en su género por su carácter desenfadado y picante, repleto de situaciones extremadamente cómicas que no dejarán indiferente al espectador. Muchos años han pasado desde su estreno en 1910, pero lo audaz de su libro, conjugado con una instrumentación espectacular, hacen que esta obra sea fácilmente adaptable a los gustos actuales.
De ambientación egipcia, en el gran salón del trono, ante la presencia del Faraón, el pueblo aclama, entusiasta, al General Putifar, que acaba de regresar victorioso de la guerra de Siria. En premio por tan noble victoria, la Faraona le otorga en casamiento a Lota, la doncella más pura y bella de Tebas. Pese a esta belleza, el General Putifar no se muestra muy complacido, y es por temor a que se desvele su gran secreto, solo compartido por sus dos fieles soldados, Setí y Selhá.
Este secreto no es otro que una desdichada herida de guerra motivada por “una flecha maldita que a Putifar lo ha dejado sin aquello que en la vida le permite a un buen esposo demostrar que…” Pese a esto, Putifar no puede evitar ser casado con la joven doncella. Paralelamente, el Copero Real lleva consigo un esclavo, José, que pretende vender en el mercado un precio de ganga. En el camino, se tropiezan con Setí y Selhá, que deciden comprar al esclavo para que sirva a su jefe y su joven esposa.
Cuando lo presentan ante ellos, Lota queda prendada de la belleza del joven hebreo, y comienza una suerte de persecuciones, quizá motivadas además, por la poca atención que le demuestra su esposo Putifar. José se declara casto y ajeno a estas muestras por parte de Lota que, despechada, decide denunciar ante la Faraona que el joven ha intentado propasarse con ella. Por su parte, Sarastro consigue derrotar de una vez a la malvada Reina de la Noche, pues el bien siempre vence sobre el mal y la luz sobre la oscuridad.
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