Los madrileños de más de 12 años de deseen pasar un Halloween terrorífico podrán visitar este viernes 29 de octubre de 2021 por la tarde o el sábado 30 y domingo 31 por la mañana o por la tarde la estación fantasma de Metro de Madrid (la antigua estación de Metro Chamberí que cerró en 1966), que se ambientará con estética de terror -esqueletos, brujas, calabazas, arañas, etc- y personajes de miedo -varios actores que interactuarán con los visitantes. Y se habilitará un espacio especial para hacerse fotografías de miedo.
Para disfrutar la visita de media hora gratuita (diez personas cada pase) es necesario reservar la entrada en https://museosmetromadrid.es/.
El viernes 29 de octubre la estación abrirá sus puertas desde las 16:00 hasta las 00:00 horas, mientras que el sábado y el domingo los horarios serán de 10.00 a 14.00 y de 16.00 a 24.00.
Estas visitas ya se realizaron en 2019. Los visitantes disfrutarán tanto por sus leyendas como por sus características de esta estación (menor luz y con mobiliario antiguo), lo que hacen de ella un escenario perfecto para disfrutar de Halloween y descubrir, a su vez, un recinto de gran riqueza histórica.
Un viaje al pasado
Entrar en la estación de Chamberí es volver al Madrid de los años 50 y 60 tan solo bajando unos escalones. La antigua estación de Chamberí pertenece a la primera Línea de Metro inaugurada en Madrid en 1919, que contaba con ocho paradas: Cuatro Caminos, Ríos Rosas, Martínez Campos, (Iglesia), Chamberí, Bilbao, Tribunal, Gran Vía y Sol.
Éste es uno de los espacios museísticos de Metro más visitados de toda la red. A principios de los 60, la Compañía Metropolitana decidió aumentar la longitud de los trenes y ante la imposibilidad de alargar esta estación, la clausuró el 22 de mayo de 1966.
El diseño era de Antonio Palacios, que optó por una solución funcional muy simple en cuanto a recorridos y organización, y por unos acabados sencillos. Incorporó la luz natural mediante un lucernario en el vestíbulo. Para el interior eligió un recubrimiento cerámico con juegos ornamentales. La bóveda de la estación va recubierta de azulejo blanco biselado y sus estribos estaban decorados por grandes recuadros de azulejos sevillanos que limitan el contorno de los carteles anunciadores, también de cerámica, en encintado ocre y azul. Estos carteles publicitarios son uno de los grandes atractivos de este espacio, ya que se conservan prácticamente tal y como fueron creados en la década de los 20.
Estuvo cerrada 42 años de 1966 a 2008
La estación de Chamberí, restaurada y abierta como museo en 2008, forma parte del proyecto Andén Cero, nombre que recibe el conjunto de los museos suburbanos, con los que se quiere sumergir al visitante en la historia de este medio de transporte revolucionario para la ciudad de Madrid.
Andén Cero consta de espacios de un valor histórico incuestionable diseñados por el famoso arquitecto Antonio Palacios, a los que hay que añadir la Nave de Motores y el vestíbulo de Pacífico. Además, las estaciones de Carpetana y Ópera ofrecen viajes muy diferentes por el Madrid de hace muchos años.
Visita obligada también es la exposición de trenes clásicos de Metro, totalmente restaurados para celebrar el Centenario de la compañía, que se celebró en 2019. La muestra, gratuita para los viajeros, incluye 12 coches históricos, incluidos los primeros que circularon hace un siglo por la línea 1. Además de los trenes, en la exposición también se pueden contemplar cerca de 100 piezas históricas del suburbano.
La llegada del metro a Madrid supuso la transformación radical de la ciudad en los primeros años del siglo XX, y ha seguido influyendo en las estructuras sociales, culturales y económicas de la región hasta hoy.
ANDÉN CERO, nombre que reciben nuestros museos suburbanos, sumerge al visitante en la historia de este medio de transporte revolucionario para la ciudad de Madrid. Consta de tres espacios de un valor histórico incuestionable diseñados por el famoso arquitecto Antonio Palacios: la Nave de Motores, el vestíbulo de Pacífico y la estación de Chamberí. Además, las estaciones de Carpetana y Ópera ofrecen viajes muy diferentes por el Madrid de hace años e incluso millones de años.