Se llama La Blanca Sport Club y es un gimnasio privado que sólo abre cuando los escolares a quienes pertenece su uso acaban sus clases. Los ingresos los recibe el Colegio Santa María La Blanca de Monte Carmelo, un colegio concertado de la Comunidad de Madrid que hace negocio alquilando las pistas, la piscina…
Dado que es el único espacio deportivo del barrio en el que está ubicado, no le faltan clientes.
La Comunidad de Madrid, propietaria de la parcela, admite que el colegio saca “rentabilidad” del gimnasio pero defiende que es una actividad legal.