A. Inurrieta*.- En Madrid, el urbanismo y las diversas modificaciones no han seguido siempre los criterios de equidad, eficiencia y especialmente el de generar actividad productiva. Es realmente chocante que existan numerosos solares que están a la espera de su modificación urbanística para poder generar actividad, pero desde la gerencia de urbanismo siempre se responde que primero hay que terminar de modificar el PGOU, y luego desenmarañar la cantidad de expedientes pendientes, aunque sabemos que el ritmo no es homogéneo, sigue habiendo empresas y ciudadanos de primera y de segunda.
Esta forma de trabajar en Madrid, muy alejada de lo que debería ser una administración eficiente y al servicio de los ciudadanos, y no de centros de poder, está perjudicando a muchos ciudadanos y empresas que podrían estar ya generando empleo y actividad, sino fuera por la lentitud y la discrecionalidad con la que nos tratan desde dicha gerencia de urbanismo. El falso argumento de que desde la administración se está en contra de los supuestos pelotazos urbanísticos, se confunde el desconocimiento de lo que significa hacer ciudad y hacer empresa, retrasa y desincentiva a los que queremos emprender y generar riqueza. El desprecio, la lentitud, y la falta de profesionalidad para con muchos ciudadanos, choca con la diligencia y un cierto trato de favor hacia algunos grandes empresarios de la ciudad de Madrid, y especialmente con un club de futbol muy famoso.
Esto se ha dejado notar en la rápida aprobación y tramitación del convenio que permite al Real Madrid levantar un nuevo centro comercial en plena Castellana, siendo esta actuación de dudosa necesidad y más aún, de dudosa eficacia para uno de los grandes problemas en Madrid: la saturación de grandes almacenes. Este nuevo impulso de un modelo de oferta comercial que converge hacia un monopolio de facto, con un gran grado de concentración y poder de negociación en precios, sorprende una vez más que se acelere esta nueva operación urbanística, que pudiendo ser legal, debería contar con el rechazo de la sociedad, y de toda la oposición política. Ha sido muy sorprendente, en este punto, la postura de IU que ha votado a favor.
Con esta nueva decisión urbanística, se puede estar cerrando el círculo de aprovechamiento urbanístico de todo el perímetro de propiedad del Real Madrid, que ya tuvo un gran apoyo público en la recalificación de la Ciudad Deportiva, y que ahora también permitirá la generación de grandes plusvalías -eso sí, a cambio de la limosna de la llamada “Esquina del Bernabéu”, que todo el mundo sabe que no ha funcionado desde la óptica comercial-. Tendremos un pequeño parque, para luego poder ir a consumir a la nueva superficie comercial que nos ofrece el empresario modelo Florentino Pérez.
Como ya tuve la ocasión de demostrar empíricamente, en Madrid gobierna en sombra un oligopolio de empresas que solo buscan su propio beneficio, y tienen de comparsa al Ayuntamiento de Madrid. Los pequeños empresarios que intentamos llenar espacios de actividad y empleo, somos tratados como presuntos delincuentes y ni siquiera se nos permite el trámite de audiencia. Así terminaremos de expulsar a muchos ciudadanos, mientras entregamos las llaves a los capitalistas del palco del Bernabéu. Enhorabuena.
*Alejandro Inurrieta es presidente del Observatorio del Distrito Salamanca.
Rodrigo J. says:
Estos cerdos capitalistas…que malos son