Además de regalarnos su bello canto y bonito volar, las golondrinas nos libran de los dichosos mosquitos (comen 60 cada hora) que tanto nos molestan en verano, pero muchos ciudadanos destrozan sus nidos por la suciedad que generan bajo los mismos. Para ellos va el aviso de este miércoles 8 de julio de 2020 de la Policía Nacional:
?Volverán las oscuras #golondrinas
en tu balcón sus nidos a colgar…?Y tú deberás respetarlos porque destruir sus nidos puede suponer una infracción.
?Las golondrinas son una especie protegida y además ayudan a mantener a raya a moscas y mosquitos ?#BIOdiversidad pic.twitter.com/K2ix2gwiKT
— Policía Nacional (@policia) July 8, 2020
Las golondrinas son especies protegidas a nivel nacional y europeo, así como sus pollos, nidos y huevos.
Destruirlos supone una infracción “grave” sancionable con multas de 5.001 a 200.000 euros, ha recordado SEO/BirdLife, la Sociedad Española de Ornitología.
Las golondrinas se van a África cuando se acerca el frío y vuelven a recorrer 3.000 kilómetros de vuelta en primavera con la esperanza de que aquí les dejemos criar a su crías.
Son tan fieles que vuelven al mismo pueblo -puede que a la misma casa- cada año. La que ves hoy es la misma del año pasado casi con toda seguridad. Regresan al mismo nido en el que ejecutan algunas reformas ayudadas por su cemento: el barro.
La golondrina suele comer unos 60 insectos a la hora, unos 850 insectos diarios. Eso equivale a unos 55 kilos de insectos consumidos por cada golondrina al año, o lo que es lo mismo, 310.250 moscas-mosquitos al año.