L. Torres.- Los 38ºC que azotan a Madrid están animando a cientos de miles de madrileños a pasar las vacaciones con las estrellas como techo de su habitación estival a pocos kilómetros de sus casas en los bungalós de los cámpings Resort El Escorial, el Arco Iris de Villaviciosa de Odón, El Canto del Gallo de Valdequemada, La Fresneda en Soto del Real, Monte Holiday en Gargantilla de Lozoya, Campiscis en Navalafuente, el cámping de Aranjuez o el cámping Alga en Getafe.
La Federación Española de Empresarios de Cámping (FEEC) ha adelantado que este verano, los cámpings de la Comunidad de Madrid están hasta la bandera y que superarán las 400.000 pernoctaciones, algo nunca logrado.
Los madrileños no dudan en escaparse de la capital y acercarse a estos cámpings ubicados en la Sierra, donde la temperatura da una tregua de unos grados y les permite disfrutar el verano junto a embalses, ríos y piscinas las 24 horas del día.
Gracias a ellos, los cámpings madrileños batirán su mejor registro histórico, obtenido en verano de 2016, cuando lograron 386.368.
La previsión de este año es un 3,5% superior.