Zonaretiro.com.- La contaminación por ozono troposférico (o3) en Madrid ha aumentado un 14% en las zonas de tráfico reducido y un 22% en las zonas de tráfico intenso entre los años 2004 y 2012, según el estudio ‘Tendencias en la calidad del aire en España de 2001 a 2012’, publicado en la revista Science of Total Environment y coordinado por el Instituto de Diagnóstico Ambiental y Estudios del Agua (IDAEA), adscrito al Consejo Superior de Investigaciones Científicas (CSIC) y por el Ministerio de Agricultura, Alimentación y Medio Ambiente (MAGRAMA).
Ahora hace un año, la organización Ecologistas en Acción ya denunció que 2013 iba camino de convertirse de los años con peores registros de contaminación por ozono troposférico en la Comunidad de Madrid, ya que en las últimas semanas se han superado con mucha frecuencia varios de los umbrales que marca la legislación para el ozono troposférico, u ozono “malo”, es decir, los niveles máximos fijados para proteger la salud de la población.
Uno de los umbrales superado reiteradamente ha sido el de aviso a la población, 180 microgramos de ozono por metro cúbico de aire durante al menos una hora. Según los protocolos de actuación, la administración tiene la obligación de prever estos episodios de ozono alto y recomendar medidas de protección de la salud a la población. Deberían aconsejar, por ejemplo, que las personas más sensibles, como niños, ancianos o asmáticos, se queden en casa con las ventanas cerradas, o desaconsejar el ejercicio al aire libre. Lo cierto es que los episodios de ozono son previsibles en su mayoría, pero, lejos de avisar con antelación, los responsables a duras penas informan una vez ocurrido el periodo de contaminación, cuando ya poco se puede hacer.
El registro de superaciones de este umbral de aviso a la población desde 2006 muestra que 2013 es ya uno de los peores años de la serie. Han sido 10 estaciones las afectadas con estos picos de contaminación por ozono troposférico y se han producido en bastantes más horas que años previos, delatando una vez más una obviedad: cuando la meteorología inestable no ayuda, y no hay vientos que dispersen los contaminantes, la polución se dispara.
Otro de los índices, el Umbral de Protección a la Salud (120 microgramos de ozono por metro cúbico de aire, que no se deben superar más 25 veces al año durante ocho horas seguidas) ha sido superado en numerosas ocasiones durante el mes de julio pasado: solamente hubo 6 días del mes en los que no hubo superación de este umbral en ninguna de las 23 estaciones de la región.
Ecologistas en Acción afirma que año tras año la región de Madrid, incluida la capital, supera los niveles admisibles de dióxido de nitrógeno, NO2, y este contaminante es el principal precursor del ozono “malo” a causa de la acción solar sobre el mismo, un fenómeno que se produce con mayor intensidad en la época estival. La tarea que con más ahínco han acometido las administraciones de la capital y autonómica ha sido tratar de conseguir prórrogas autorizadas por la Comisión Europea para poder seguir superando los niveles de este contaminante.