C. Linares.- El municipio madrileño de Chinchón acoge la noche de Sábado Santo la representación de su Pasión Viviente, una de las más famosas de toda la Comunidad de Madrid y la única que ha sido declarada Fiesta de Interés Turístico Nacional.
Este grandioso Via Crucis, el más antiguo de la región, recorrerá las calles del municipio al anochecer y estará representado por más de 250 vecinos de todas las edades.
La Pasión de Cristo de Chinchón es la representación más antigua de la Comunidad, ya que data de 1963 como iniciativa del entonces sacerdote del pueblo D. Luis Lezama. Cada Sábado Santo, más de doscientos vecinos protagonizan un Vía Crucis cargado de emotividad que recorre las calles y convierte por un día a la localidad madrileña en Jerusalén.
El acto comenzará en el Ayuntamiento, donde en uno de sus balcones se representará la Última Cena. Al caer la noche, en la Plaza de San Roque se presentará la Oración de Jesucristo en el Huerto y posterior prendimiento por los romanos. Poncio Pilatos presidirá el balcón situado en la calle Molinos y, tras condenar a muerte a Cristo, empezará la subida por la calle de la Amargura.
Tras las tres caídas de Cristo, se producirá el encuentro con la Virgen María y la llegada al Calvario, donde una imponente escena representará la crucifixión, muerte y posterior resurrección.