Para minimizar el residuo y fomentar la economía circular, el Ayuntamiento de Madrid puso en marcha en 2016 un proyecto piloto que en 2019 ya es una realidad asentada: ReMad, un sistema diseñado para el intercambio de objetos de los que las personas se quieren deshacer pero que pueden tener un nuevo uso.
Así, en los 16 puntos fijos de la capital se encuentra un contenedor ReMad en el que depositar y poder hacerse con los enseres.
Por cada entrega de un objeto, se reciben 100 puntos. Estos puntos, a su vez, permiten retirar objetos que han entregado otros usuarios, por lo que se descuentan 50 puntos. Solo por la inscripción ya se obtienen 100 puntos.
Una vez realizada la reserva, los usuarios disponen de 7 días naturales para recoger el objeto en el centro ReMAD donde se encuentre.