L. Torres.- Ya sea invierno o verano, la zona de la barba de los hombres puede resentirse con el afeitado diario y son comunes la irritación de la piel, pequeñas lesiones, granitos, picor, manchas, bello enquistado, comedones… La maquinilla de afeitar desprotege la piel, dejándola débil; y en verano estos problemas se agravan por la exposición al sol.
Por ello, el Reebok Sports Club del centro comercial ABC Serrano ha puesto a disposición de sus socios y todos los madrileños que, no siendo socios, deseen acercarse a su spa, un innovador tratamiento denominado Shave, que protege y renueva la piel de esta zona de la cara, limpiándola y preparándola de cara a los daños del afeitado y del sol.
La responsable del spa del Reebok Sports Club, Noemí Gallo, ha explicado a Zonaretiro que “en la piel agredida, al quedar irritada, hiperexfoliada, y desprotegida, las secuelas que puede causar el sol pueden ser nefastas. En clima soleado y seco necesitamos hidratar mucho la piel y protegerla del sol, utilizando siempre un producto hidratante con factor de protección”.
Piel suave con un tratamiento Shave mensual
Según Noemí Gallo, basta una sesión mensual para lucir una piel sana y joven, “como el culito de un bebé”, a pesar de tener que pasar por el afeitado diario, como han comprobado los usuarios que lo solicitan desde enero de 2012, fecha en la que el Reebok Sports Club incorporó el Shave a sus tratamientos de belleza masculinos.
Son 30 minutos durante los cuales se realiza un estudio disgnóstico para examinar zona a zona las anomalías y necesidades de la piel; se aplica un gel desincrustante para retirar todas las impurezas de la piel y un exfoliante de arroz. “Este exfoliante es especial al no contener el típico granulito, que lo único que haría sería irritarnos más la piel. Es una espumita muy agradable que unifica y alisa la piel en las zonas donde no hay ningún tipo de exfoliación y suaviza y afina los poros”.
Después, se aplica un suero reparador y una mascarilla calmante de avena, que baja de inmediato cualquier tipo de irritación que tenga la piel. “Es el producto más calmante y descongestivo que he usado nunca”, confiesa la experta en belleza.
Tras el calmante de avena llega el booster o “chute”, dicho vulgarmente. “Es un producto con una concentración en activos muy elevada que permite que la hidratación penetre en capas más profundas”, dice. Después, un bálsamo nutre la superficie y la preserva del exterior. Y finalmente se aplica una pantalla de protección en rostro y ojos: una película que queda en la piel y que protege de los rayos nocivos del sol.
Tras estos pasos y transcurridos los 30 minutos que dura el tratamiento, la piel luce elástica, hidratada, fresca y sana.