S. R.- Investigado por los presuntos delitos de malversación de caudales públicos, fraude, organización criminal, prevaricación, falsificación de documentos, fraudes en las transacciones internacionales, cohecho y blanqueo de capitales, y en libertad condicional desde hace veinte días, el expresidente de la Comunidad de Madrid, Ignacio González, que sólo está obligado a comparecer una vez por semana en el juzgado, a la espera del juicio que puede llevarle a pasar 20 años entre rejas, como pide la Fiscalía Anticorrupción, aprovecha el resto de los seis días de la semana para hacer turismo por España (no puede salir del territorio nacional).
Este fin de semana estuvo en Santoña (Cantabria) y aprovechó para hacer unas compras en el famoso mercadillo de esta localidad costera publica el diario El Español.
Extremadamente delgado
En las fotos de El Español se ve a González con un aspecto físico muy diferente al que tenía antes de ingresar en la prisión de Soto del Real, donde ha pasado 202 días y habría perdido entre 15 y 20 kilos.
Quienes le vieron, aseguran que “no se le tienen los pantalones”. “Éste no pesa ni veinte kilos echao a mojo”.
González pretendía ir desapercibido y por ello iba “casi todo el rato con capucha, aunque no llovía”, declaran quienes le vieron al diario El Correo.
“Hablaba mucho por el móvil”, dicen. “Él miraba las cosas y otro venía y las compraba. No habló en ningún momento. Pero él miraba y comentaba a alguno que le acompañaba ‘estas alubias son buenas’, y entonces ese las compraba”.
«Iba con la mujer, una hija y otro matrimonio. Está tan delgado que no pesa ni veinte kilos echado a mojo». Ignacio González, pillado en el mercadillo de #Santoña tras salir de la cárcel de Soto del Real https://t.co/q4MMusFU6t
— El Correo (@elcorreo_com) 28 de noviembre de 2017